Después de tener un bebé, los músculos del suelo pélvico necesitan tiempo para volver a su estado normal. Durante el embarazo, tu cuerpo produce una hormona llamada relaxina, que suaviza los tejidos para que tu cuerpo pueda expandirse a medida que tu bebé crece, y también permite que el suelo pélvico se estire durante el parto. El efecto de esta hormona puede durar hasta seis meses después del parto en algunas mujeres.

¿Quiénes están en mayor riesgo de tener problemas en el suelo pélvico?

Algunas mujeres tienen un mayor riesgo de sufrir problemas en el suelo pélvico durante el embarazo y el parto. Esto incluye a las mujeres que han tenido:

• Múltiples partos.

• Partos instrumentales (uso de fórceps o ventosa).

• Una fase prolongada de empuje durante el parto (más de 1 hora).

• Desgarros perineales severos.

• Bebés grandes (más de 4 kg).

Si te encuentras en alguno de estos grupos, es aún más importante que cuides de tu suelo pélvico tras el parto.

¿Cómo reducir la presión sobre tu suelo pélvico?

Si acabas de tener un bebé, es crucial reducir la presión sobre tu suelo pélvico, especialmente en los primeros meses. Aquí te dejamos algunos consejos sencillos para facilitar su recuperación:

1. Retoma el ejercicio poco a poco, asegurándote de que tu rutina sea respetuosa con tu suelo pélvico.

2. Evita levantar peso a menos que sea absolutamente necesario.

3. Contrae el suelo pélvico antes de levantar, estornudar o toser para protegerlo.

Señales de que tu suelo pélvico necesita atención

Es importante estar atenta a los signos comunes de que tu suelo pélvico podría necesitar ayuda. Estos incluyen:

• Fugas de orina al reír, toser, estornudar o hacer ejercicio.

• Dificultad para vaciar la vejiga o el intestino.

• Pérdida involuntaria de control de la vejiga o el intestino.

• Paso involuntario de gases.

• Prolapso, que puede sentirse como una sensación de pesadez o un bulto en la vagina, acompañado de incomodidad o sensación de arrastre.

Ejercicios del suelo pélvico: clave antes y después del parto

Los ejercicios del suelo pélvico son esenciales tanto durante el embarazo como después del parto. En Método Personal, te ayudamos a entender cómo cuidar de estos músculos para que se mantengan fuertes y saludables. Después de tener a tu bebé, es vital seguir prestando especial atención a esta área para asegurar una recuperación completa.

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